Utilización de un dispositivo de medición de contaminantes para la evaluación de riesgos
Si se dispone de una evaluación de riesgos y puede reconocerse un peligro potencial para el trabajador, el empresario está obligado a adoptar las medidas de protección adecuadas. Para ello, es aconsejable medir primero la concentración de la sustancia respectiva en el área de trabajo utilizando un dispositivo de medición de contaminantes.
Para encontrar el dispositivo de medición de contaminantes adecuado, debes tener en cuenta qué sustancia se va a medir. Por ejemplo, el dispositivo de muestreo SG10-2 puede medir fracciones de polvo mediante mediciones de partículas y el dispositivo de muestreo SG5200 puede medir gases.
Si existe la sospecha de una posible exposición a contaminantes, debe realizarse una medición lo antes posible. El dispositivo de muestreo para mediciones de contaminantes PM4-2 es adecuado para zonas interiores, por ejemplo, ya que puede manejar un gran volumen de mediciones.
Puedes encontrar más información sobre salud y seguridad en el trabajo en nuestro artículo Medidas de protección en el área de trabajo.
¿Qué son los contaminantes?
El término contaminantes se refiere a todas las sustancias o mezclas de sustancias perjudiciales para la salud y/o la naturaleza. Existen dos categorías: sustancias de origen natural y sustancias producidas sintéticamente. El efecto nocivo puede producirse tanto por contacto como por absorción (por ejemplo, inhalación) a través de las mucosas.
Como ocurre con las sustancias tóxicas, la concentración y el entorno en el que se encuentra la sustancia son decisivos para el efecto nocivo. Además, también es decisivo el tiempo que has estado expuesto a la sustancia.

Efectos sobre la salud
Las consecuencias para la salud dependen de la sustancia en cuestión y, por tanto, no pueden generalizarse. Otro factor es la concentración de la sustancia y la duración de la exposición. Existen distintos peligros según el tipo de sustancia. Por ejemplo, el amianto tiene un efecto cancerígeno y la inhalación de polvo puede provocar neumoconiosis (neumoconiosis).
Al principio del uso de una sustancia se lleva a cabo una evaluación de riesgos. Para esta evaluación se consultan la Ley de Salud y Seguridad en el Trabajo (sobre todo el artículo 5) y la Ordenanza de Sustancias Peligrosas (artículo 7). Ambas definen el término «contaminantes peligrosos» y contienen medidas sobre cómo organizar la salud y la seguridad en el trabajo. Para ello, se aplican diversas Normas Técnicas para Sustancias Peligrosas (TRGS). Qué TRGS es relevante en detalle depende del respectivo área de trabajo y de la sustancia (peligrosa).
¿Con qué frecuencia se producen los contaminantes?
La cantidad de contaminantes depende de cada ámbito de aplicación. Sin embargo, se puede dar una visión general. En los espacios interiores, como las oficinas, los contaminantes más comunes son el polvo fino, el PCP (pentaclorofenol), el PCB (bifenilos policlorados) y el moho. El grado en que se producen depende de la antigüedad y la construcción del edificio.
Los edificios antiguos también pueden estar contaminados con amianto, por ejemplo debido a material aislante obsoleto.
Fuentes:
[1]: http://www.chemie.de/lexikon/Schadstoff.html
[2]: https://www.bgrci.de/fileadmin/BGRCI/Downloads/DL_Praevention/Fachwissen/Gefahrstoffe/Analytik_Symposium_2009/Kleine_-_Homepage.pdf
[3]:https://www.baua.de/DE/Angebote/Rechtstexte-und-Technische-Regeln/Regelwerk/TRGS/pdf/TRGS-402.pdf?__blob=publicationFile&v=4