El recuento de polen alcanza su punto álgido cada primavera, y pasar tiempo tanto en el exterior como en el interior de los vehículos es especialmente problemático para los alérgicos. Los filtros de habitáculo, que suelen ser estándar, están diseñados para filtrar los gases de escape y otros contaminantes atmosféricos. Si el filtro de habitáculo deja de cumplir su función, pueden entrar en el interior del vehículo más contaminantes atmosféricos, como polvo, hollín, óxidos de nitrógeno, benceno, ozono o polen, por ejemplo a través del sistema de aire acondicionado.
Alergias
Sustancias peligrosas en clínicas y consultas médicas
La manipulación incorrecta de sustancias peligrosas supone a menudo un riesgo potencial para la salud de empleados y pacientes en los hospitales y en las consultas médicas cotidianas. Las precauciones higiénicas exhaustivas son especialmente necesarias en estas áreas donde se trata a personas enfermas. Los desinfectantes y productos de limpieza utilizados con este fin, así como los productos y sustancias médicas para los tratamientos, contienen a menudo sustancias químicas que pueden causar irritación, quemaduras cutáneas, alergias y otros problemas de salud.
Medir el polvo de tóner con la Gravikon PM4-2
Los informes sobre los riesgos para la salud causados por el polvo del tóner de las impresoras y fotocopiadoras láser están preocupando a muchos consumidores. Las finas partículas de polvo pueden llegar al aire que respiramos y contaminar el aire interior. Las personas entran en contacto con el polvo de tóner a través de impresoras, fotocopiadoras o dispositivos multifunción, sobre todo en el área de trabajo.